Albergues para migrantes experimentan saturación en el norte de México
Por las restricciones de asilo impuesta por el país vecino.
Los albergues para migrantes en el norte de México están experimentando una creciente saturación debido a las recientes restricciones de asilo impuestas por la administración Biden en Estados Unidos. Estas medidas han llevado a un aumento en el número de migrantes varados en ciudades fronterizas mexicanas, a más de una semana de que entrara en vigor la acción ejecutiva.
Los espacios de alojamiento se ven saturados, una vez que Arizona deporta hasta 500 personas por día, según directores de los centros afectados.
Organizaciones humanitarias y activistas han alertado sobre la situación crítica en los albergues, que se encuentran al borde de su capacidad. La falta de espacio ha generado condiciones precarias para los migrantes, quienes enfrentan dificultades para acceder a servicios básicos.
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En el caso del refugio San Juan Bosco en Nogales, actualmente albergan alrededor de 120 personas, pero antes de que entrara en vigor la política migratoria su espacio era para alrededor de 40, informó el director del albergue, Juan Francisco Loureiro.
Las nuevas restricciones de asilo, que incluyen la prohibición de solicitar protección para aquellos que cruzan la frontera de manera irregular, han sido cuestionadas por grupos defensores de los derechos humanos. Argumentan que estas medidas violan el derecho internacional y ponen en riesgo la vida de personas vulnerables que huyen de la violencia y la persecución en sus países de origen.
La saturación de los albergues en el norte de México también ha generado tensiones en las comunidades locales, que se ven afectadas por la creciente demanda de servicios y recursos. Ante esta situación, organizaciones civiles han hecho un llamado para implementar medidas que aborden la crisis migratoria y garanticen la protección de los derechos de los migrantes.
La situación en los albergues pone de manifiesto la necesidad de una respuesta integral y coordinada a nivel regional para abordar las causas estructurales de la migración forzada y garantizar vías legales y seguras para solicitar asilo.
