Autoridades confirman móvil criminal en masacre de Apaseo el Grande
De acuerdo con los datos oficiales, un grupo de hombres armados irrumpió en el panteón y abrió fuego contra los asistentes a un sepelio. Entre las víctimas se encuentran una mujer, una menor de edad y seis hombres.
La masacre ocurrida en el panteón comunitario de San José Agua Azul, en Apaseo el Grande, Guanajuato, donde ocho personas murieron y dos más resultaron heridas, se debió a una disputa entre grupos del crimen organizado, informó el Secretario de Seguridad y Paz del estado, Juan Mauro González Martínez.
El funcionario estatal indicó que existe una línea de investigación sobre el ataque armado registrado la noche del jueves 6 de marzo durante un sepelio. Sin embargo, la Fiscalía General del Estado, encabezada por Gerardo Vázquez Alatriste, ha mantenido hermetismo en torno al caso y no ha incluido información sobre el multihomicidio en los reportes regionales que emite diariamente.
De acuerdo con los datos oficiales, un grupo de hombres armados irrumpió en el panteón y abrió fuego contra los asistentes.
Seis personas murieron en el lugar, mientras que dos más fallecieron posteriormente en el hospital. Entre las víctimas se encuentran una mujer, una menor de edad y seis hombres.
Aunque el Secretario de Seguridad evitó mencionar el nombre de las organizaciones criminales involucradas, confirmó que se trata de una confrontación entre grupos delictivos.
"Ese dato de si es uno o es otro no lo puedo comentar por respeto a la investigación, pero de que se trata de una disputa de grupos criminales, claro que sí", declaró.
González Martínez destacó que la rápida respuesta de la Policía Municipal de Apaseo el Grande permitió localizar una camioneta con evidencia clave para la investigación. En el vehículo se hallaron cargadores, equipo táctico y otros indicios que están siendo analizados por las autoridades.
Criminales atacan a policías en Guanajuato
Por otra parte, el titular de Seguridad estatal se refirió al asesinato del exdirector de la Policía de Celaya, Carlos Miguel Reyes Ortega, y del oficial Roberto Carlos Juárez Hernández, ocurrido en Celaya la noche del mismo jueves. Según González Martínez, ambos agentes mantenían enfrentamientos con dos grupos criminales, lo que refuerza la hipótesis de una represalia.
"La delincuencia organizada empieza a querer cobrar factura de las y los elementos que están haciendo su trabajo", afirmó.
El funcionario estatal hizo un llamado a las fuerzas de seguridad y a la ciudadanía a adoptar medidas de autoprotección ante el clima de violencia en Guanajuato. Subrayó que, aunque existan vehículos blindados o protección reforzada, la disciplina y la prevención son esenciales para enfrentar la amenaza del crimen organizado.
CON INFORMACIÓN DE AGENCIAS